lunes, 18 de julio de 2011

Niebla...


En el aire (en tu aire)
se va masticando el sabor de una pena….
soledades (la tristeza)
que vagan sin rumbo recorriendo tus venas.
Y en tus versos (piel de letras)
el invierno encendido de unos ojos que esperan
la caricia (piel canela)
que no alcanza a rozarte con sus vocales quietas..

En tu aire ¡vuestro aire!
se respiró distancia, el dolor de la ausencia,
la tristeza (soledades)
vaciando de tiempo los relojes de arena.
Y en sus letras (fuego y carne)
se atrevió la nostalgia a hacerse dueña,
y la ternura ( inexpugnable)
se recostó en esa lágrima… que no cesa.
No hay preguntas, no hay respuestas,
no existen normas, ni reglas…
Le entregaste una caricia
¡que pudo llenar una vida entera!

Ella fue tuya, tú lo sabes,
se colmó de ti, de tu belleza,
ella fue lluvia fresca en la tarde
rociando de dudas la certeza.

Ella fue tuya,  tú lo sabes
 hembra y mujer, con  piel de letras,
ella fue verbo,  hoguera y carne,
se desnudó ante tus ojos ¡ojos de tierra!

Más no hay preguntas, ya no hay respuestas
no existen normas, no existen reglas…

Ella se ha ido, breve y escueta,
tras la quimera de su existencia.
Ella se ha ido con su tristeza
a sembrar mariposas sobre las piedras.

Ahora no existe, ahora ya es tarde..
perdida y sola
¡se sumergió en la niebla!

                                         Ángela.