lunes, 30 de junio de 2014

El olvido...


"El olvido está tan lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda."


"El día o la noche en que el olvido estalle
salte en pedazos o crepite
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrará los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será que no hay olvido."


Fragmentos de... 
"Ese gran simulacro"
de Mario Benedetti.

viernes, 27 de junio de 2014

Somos...


Y... fuimos: 
La quietud del tifón.
El sonajero del bebé.
El triquitraque del tren.
De la condena: redención.

Silabeando amor: dos.
En la cadena, un solo eslabón.
Tuyo - mía... Tú.
Mío - tuya... Yo.

Palíndromo monovocálico:
¿Somos o no somos?
¡Somos!
Somos siendo pasado.



jueves, 26 de junio de 2014

La K de Ké sé yo...

La K siempre me llamó la atención, en nuestro abecedario. Es una letra, la nº 12, que no me cuadró, ni le veo demasiado sentido, entre todas las demás... (bueno, ésa y la W... también)
Se me asemeja a como si se hubiera colado por un desliz y anduviera buscando su lugar.
O quizá... estuviera inventada para que usted, Doña Ana, nos la diera a interpretar, porque:
"El que no inventa, no vive", como bien dijo.



Se detuvo su reloj, a muy principios de verano, para otorgarle tributo.
Nos dejó llorándole, en la puerta de la Luna, como los soldados lloran de noche, en un país deshabitado, a los hijos muertos... en esta tierra.


Ana Mª. Matute Ausejo, Testigo Mágico de la Literatura en España.
Miembro de La Real Academia Española.
Gran fabuladora y una escritora con una imaginación desbordante.
Dicen que, quizá, haya sido... la mejor novelista de la posguerra.

(Barcelona, 26 de Julio de 1.925 - 25 de Junio de 2014)

Descanse en paz.




miércoles, 25 de junio de 2014

Inmortal...


Qué manía la mía de vivir,
los días de hielo,
nómada y errante,
en el aliento del viento.

Lo que abruma volver
cuando, al estar perdida,
a mi yo misma
... encuentro.

Hoy quisiera 
que zozobrase el mundo,
sin lamentos,
conmigo dentro.

domingo, 22 de junio de 2014

Todavía...

Todavía piso sobre mis huellas
si creo que merece la pena volver.
Todavía tengo esquejes,
pero ya opto dónde no tolerarles emerger.
Y todavía te aguardé
con aquél poema que no supe escribir.
Y llegaste...
Llegaste con aquella cara de perro pachón
(que no sé por qué se expresa así)
y me guardé las palabras
y, también, las ganas de ti.
Todavía sé jugar al tute,
y silbar y, 
aún, querer quererte... 
pero muy lejos de mí.

viernes, 20 de junio de 2014

Arcanos...


Querido desconocido:

Tropezamos como glaciales desabridos, calados de sinsabor, sin ningún interés ni antecedente creado.
Los avatares intervinieron para que en apenas tres cortas frases, que se suponían de pura cortesía, nuestros desconfiados vocablos se afianzaran y nuestros demonios pálidos, farsantes y obscenos, se fueran aislando y divorciando, al... en la línea de mi sonrisa, arquearse la tuya y en el arco de tus dedos los míos permanecer curvados, tras el incidente impensado.

Y ahora que me encuentro en el mismo sitio de ayer, en el mismo esquinazo resguardado, misma mesa, misma silla, y casi misma yo... pensándote, con tu silla esperando... te escribo, aún a sabiendas de que, aunque no nos dijimos de encontrarnos, no tardarás.

Llegué antes que tú. Bastantes minutos le adelanté a la hora que no acordamos, con ésta intención... la de decirte, mediante misiva, lo que quizá al verte frente a frente se me hubiera olvidado:

Desearía que siguieras cristalizando esos secretos que, al compartirlos conmigo, te hicieron chispear las pupilas, algo que hacía mucho que no te había pasado. Y a los que, retenidos, se quedaron en el tintero... me encantaría que les regalaras pluma y papel para que viajaran.

No quisiera que continuases en una copa, una tras otra, de vino... buscando estrellas, ni contando los infiernos que ves arder en el cielo, ni los que crees que arderán tras la botella... en ese rincón desportillado al que tú llamas tu aislado purgatorio, y en el que improvisas nuevas maneras de dejar tus vicios, a la vez que late en tus manos el querer seguir sujetándolos.

Anoche, motivamos desmotivos añejos, recuerdo, y aunque nos sigamos desconociendo y Anónimos sean nuestros nombres con los Arcanos por apellidos... podremos seguir intentándolo con éxito, imagino.

Demostrémosnos que entre solo dos, nosotros, se puede obtener lo que las acciones pluralizadas y masivas, una a una, no consiguieron engendrar.

Además, te confesaré que... en estos tiempos en que la muerte se detiene, tan a menudo, a mi vera... arrebatándome tanto, no quiero, ya, que de mi vida te me pierdas.

Firmado:
La que en este preciso momento te mira... en lo que lees, sin haber sabido que tú la contemplaste mientras se deshacía de estas letras que ahora son tuyas.


jueves, 19 de junio de 2014

Almas gemelas...





Mi alma es, frente a tu alma, 
como el mar frente al cielo: 
pasarán entre ellas, 
cual la sombra de un vuelo, 
La Tormenta y El Tiempo 
y La Vida y La Muerte.



                                       
                                         Delmira Agustini.
                                           (De: Desde Lejos)





lunes, 16 de junio de 2014

Hechizo...


Luna radiante en la noche,
rocío de la mañana
tus risas son como cuerdas
de una guitarra.

Espontánea en tu frescura,
tan dulces son tus palabras
que, entre tus labios sonríen,
brillos en danza.

Eres pasión y alegría
con el calor de una llama
que por la noche es poesía
y es canto al alba.

Eres beso y eres rima,
y envuelves con tus miradas
jugando a ser poesía
con la magia de las hadas.

Eres mujer y eres niña,
lluvia embrujada
que hechizas con tu inocencia
mi vieja alma.


Jerónimo García Jorquera.
(Brother)

viernes, 13 de junio de 2014

De nadie...
























¿Cómo no percibí, antes, el acre olor a felonía?

Se destrabó la pared
del obcecamiento
y sin fugarme
atravesé su muro.
Deserté de las murmuraciones
enunciadas a murmullos
que, sin dejarme inmune,
no me atañían en absoluto.

Me sentí grácil,
casi etérea,
sin pesadumbre;
libre de otros
...muy de mí.
El bosque, tan solo, mi dueño,
yo, de él, el espíritu.
Mas...
tanta atmósfera condensada,
vorágine sofocante,
a mis diminutos pulmones
los enajenaba.

Retorné no sé a dónde,
aún no tengo constancia.
Ni me pertenezco, ni soy de nadie.
¿No echaré raíces en ningún sitio?
-pensé-
recorriendo el sendero
del suspiro
al escalofrío
en una décima de segundo.


domingo, 8 de junio de 2014

Unidos...

Como el junco,
como la espiga
blandiéndose,
unidos,
cubiertos de umbrías organzas
en tierra inverna...

Así de cimbreante se nos asemeja,
la noche cerrada 
sin luciérnagas
cuando es su motivo
el desmembrarnos
y el fuego se nos apaga,
y el fuego se nos enciende
calcinándonos
en las heladas teas
de ésta inmanencia sellada.


miércoles, 4 de junio de 2014

Chubascos...


Mucho no puede ser como tú deseas.
Todo no puede... como quiero yo.

-Tú dices:
"Ahora, a primeros de Junio"
-Digo yo:
"En Septiembre, a finales"

... Y comienza a despeñarse tu dicción
como granizo lacerante.
... La mía,
como una tormenta sin techumbre
e indomable.

Se te desbordan los latidos en las sienes.
A mí, el alma se me parte.


Soterré tus chubascos bajo las piedras.
Tú, a los míos, en una era estéril los sembraste.

Todo ello quedó en un aguacero exánime.
Guarismo disipable.


No será en Junio,
ni a principios ni a finales,
pero sí...
en Agosto, o antes.



martes, 3 de junio de 2014

Dolía...

Hoy paseé por jardines,
semejantes a laderas,
plagados de maleza y cardos.

Los corazones de mis pasos
sangraban secretos
humedeciendo la soledad.

Desabrigadas las huellas
tiritaban
al tatuar el sendero.

Pero... en el ocaso llegas.
Llegas como siempre,
como quien no se despidió.

Y ya...
ya se me comienza a tapizar la carne,
al conjugárseme la piel,
en el trasnochar de tus manos.

                                            Dolía...
dolía el vagar sin ti
con el quizá
de no sentirte más.