Me ahogo en los mares de mis dudas,
me pierdo entre los entretejidos silencios.
Mis ojos se descalzan mirando otros ojos
y de puntillas huyen de la osadía del miedo.
Menguo el desaliento para alcanzar a ver más,
análoga es la vista con la verde tristeza.
Jamás se fundió cuerpo, alma y palabra
y el llanto llama, vehemente, a la espera.
No hay respuesta, ni verdad, ni certeza;
tan sólo vislumbro clara lejana ceguera
y entre nubes mi lágrima tiñe de rojo
las últimas nieves de ésta primavera.
me pierdo entre los entretejidos silencios.
Mis ojos se descalzan mirando otros ojos
y de puntillas huyen de la osadía del miedo.
Menguo el desaliento para alcanzar a ver más,
análoga es la vista con la verde tristeza.
Jamás se fundió cuerpo, alma y palabra
y el llanto llama, vehemente, a la espera.
No hay respuesta, ni verdad, ni certeza;
tan sólo vislumbro clara lejana ceguera
y entre nubes mi lágrima tiñe de rojo
las últimas nieves de ésta primavera.