jueves, 15 de marzo de 2012

La sombra del Alma...


Repiquetea lluvia
en los aleros de las ventanas.

El alba no prospera
en este crepúsculo.

Esperando el amanecer,
... me disipo en la pena.
Esperando - le
... me disipo en las gotas.

Pena sobre pena.









En el fluvial asfalto duerme la soledad
compartiendo techo
con las voces de la noche.

Lluvia sobre lluvia.

Incubando silencio el alma se agita,
un relámpago ilumina su sombra.

Accidentalmente,
inherente y sustantiva,
la piel maldice
la pirámide de su desdicha.

Sombra sobre sombra.